Desde hace varias décadas en la Argentina atravesamos una situación de crisis económica, social y política, la cual muestra su rasgo más dramático en los chicos que fueron marginados de la sociedad, que tienen sus necesidades básicas insatisfechas y que no tienen futuro. En este marco, hace ya casi diez años, un grupo de personas, cansados de ver como los dirigentes políticos no se preocupan por esos chicos y como desde las distintas esferas del Estado se niega una ayuda a ese sector, hemos decidido agruparnos para tratar de incluir en la sociedad a los que hoy están excluidos. De esa unión de voluntades nació la Fundación de la Calle a la Vida, que es una Organización no Gubernamental que tiene vida desde el año 2000, teniendo como único fin la atención y contención de niños carentes que se encuentran en situación de riesgo. Nuestra Fundación no recibe apoyo estatal y sólo se sustenta con las invalorables donaciones que hacen particulares con sensibilidad social. En la actualidad, la Fundación de la Calle a la Vida le brinda asistencia a 75 niños y casi 20 padres en forma diaria. Esta fundación se encuentra compuesta, fundamentalmente, por un grupo de personas que estamos dispuestos a ser solidarios con los más necesitados. Entendemos que la solidaridad no es sólo dar un pedazo de pan o un abrigo, también es regalar horas de tiempo, de conocimiento y de trabajo. Estamos convencidos que en la realidad que vive hoy nuestro país la solidaridad es parte del ser ciudadano. Lo consideramos un deber cívico.